A la hora de realizar campañas publicitarias en Internet existen diferentes estrategias. Dos de las principales, y las más notorias, son: vender online o hacer branding.
Para vender online lo principal es ofrecer un producto o servicio que se pueda realizar mediante una transacción en Internet. Para algunas empresas este es el eje de su negocio, por lo que le sacan el jugo a los beneficios que tiene la publicidad en Internet.
Clickeo el banner, veo el producto, aprieto el botón comprar, ingreso mi tarjeta de crédito, compro el producto y así cumplo con el objetivo de la campaña.
Existen muchos productos que por su naturaleza son difíciles de vender en Internet. Por ejemplo, pasa con la moda. Aunque algunas empresas se han ido adaptando a su realidad haciendo campañas de acuerdo a esto, no es lo mismo que ir directamente a una tienda a probarse la camisa y estar seguro que los botones te cierran y que no matarás a nadie por “fatiga de material”.
Entonces las empresas ocupan otro tipo de estrategias, donde tienen que enfocarse más en la marca y en potenciar un concepto asociado al producto. Podemos reconocer los banners al ver que te indica a “conocer más del cepillo de dientes en la página” o a “concursar para ganar un año de desodorante gratis”. Acá es cuando nos referimos al branding.
Hay empresas que ocupan ambas estrategias. Si bien se caracterizan por el mayor uso de la modalidad venta, como por ejemplo París y Lan, tambien realizan campañas de branding ya que estos anunciantes tienen tanto tiendas online como también tiendas físicas o “offline”.
Como vimos, la venta y el branding son dos estrategias opuestas de realizar campañas publicitarias online. Entre estos polos existen varios matices y combinaciones que las marcas utilizan dependiendo del contexto de su negocio y los objetivos que quieran lograr.